31 de Mayo 2005
feria del libro
en la caseta 87 de la feria hay un mostrador que rebosa libros por todas partes, libros de cuentos pequeños, con tapas duras, que al abrirlos parecen saltar, con solapas para levantar, grandes, con dibujos a lápiz, con mucha letra, con 4 frases, libros que pasan desapercibidos y otros que te atrapan por dentro y no te sueltan.
y detrás de ese mostrador está Gustavo, que en cuanto te ve mirar uno de sus cuentos con especial atención empieza a retarte con ese acento suyo y te va sacando poco a poco decenas de historias que intuye que van a gustarte. no habla para venderte libros, habla para que te enamores de ellos, para que sepas ser crítico con las historias que tienes entre las manos, para que aprendas a diferenciar unos ilustradores de otros. habla y te deja tonto con sus explicaciones y con su forma de contarte hasta el mas minimo detalle del autor, de la editorial....y te pasarías horas escuchándole y comentando con él los finales abiertos, los cuentos "excesivamente pedagógicos"...
cuando termine la feria gustavo volverá a su territorio, a su libreria pequeña de la calle santiago, con su suelo de madera con peces dibujados, las marionetas por las estanterias y los libros esperando a que alguien se los lleve.
tendré que hacerle una visita...pues desde que me enseñó esta historia no puedo sacármela de la cabeza.
