cartas a nadie

el voto útil

aquí os dejo un artículo que escribió uno de mis escritores favoritos...se publicó en El Mundo en el 99...ahora que estamos en campaña electoral...la verdad es que nos hace pensar un poco. ya me diréis qué os parece.

el voto útil_ juan bonilla

Me temo que la política es ya una actividad que sólo tiene sentido ejercer en el Tercer Mundo, es decir, en aquellos lugares donde todavía se puede hacer algo por quebrar la estricta superioridad del dinero sobre cualquier ejercicio público. Esto quiere decir que en España las únicas temporadas que decididamente pueden hacernos pensar que, en efecto, aún quedan políticos son las de campañas electorales en municipios muy pobres, allá donde un candidato recrimine al alcalde que gaste el fondo del Ayuntamiento en farolas muy decorativas en vez de construir un parque, allá donde la ideología no consiste en grandes pamplinas pronunciadas con voz engolada, sino en decidir en qué gastamos el dinero, si en potenciar al equipo del pueblo para que ascienda a Primera regional o en arreglar los patios en ruinas del colegio. El resto es espectáculo, una especie de circo sin encanto donde los grandes cerebros de la propaganda de cada partido idean carreras en sillas de ruedas o partidos de frontón cuya única finalidad es atraer a unos cuantos fotógrafos. Yo nunca voto. Ya sé que la gente que tiene ahora 40 años considera eso, casi, una apología del fascismo, pero qué vamos a hacerle: me parece más ingenuo que no votar, el hecho de votar a alguien porque es el menos malo, o el más simpático o el que tiene la voz más afinada. A mí, por ejemplo, me cae muy bien Rosa Díez porque se parece mucho a una amiga mía y he visto que tiene una hija muy atractiva, pero votarla por eso me parece excesivo. Lo que sigo sin entender es por qué el voto en blanco no se considera un voto útil, por qué no cuenta. Si supiéramos que votar en blanco iba a servir de algo que no fuera prestar ventaja a los candidatos más votados, creo que el índice de abstención podría encontrar recompensa en la distribución de escaños en el Parlamento, en los municipios, en Europa. ¿Se imaginan que tras unas elecciones generales el voto en blanco obtiene cuatro o cinco asientos? ¿Se imaginan que en los debates del Congreso se le concediesen unos minutos para expresar su silencio a esos asientos vacíos? ¿Se imaginan que ese silencio se propaga y en las siguientes elecciones en vez de cuatro asientos vacíos se consiguen 20? Rugiría así el silencio de los que callan no porque otorguen, sino porque realmente no parece que a estas alturas merezca la pena decir nada.

juan bonilla es autor de varias novelas como : nadie conoce a nadie, los príncipes nubios, cansados de estar muertos,... Además de haber publicado varios libros de historias cortas como la compañia de los solitarios o el que apaga la luz. si no habeis leido nada suyo...os lo recomiendo.